El diputado Pedro Ávila Nevárez (PRI) inició las gestiones, a fin de que la Cámara de Diputados reconozca los méritos de estadista del ex presidente Adolfo López Mateos, e inscriba su nombre en letras de oro en el muro de honor del salón de sesiones de San Lázaro.
La propuesta de Ávila Nevárez coincide con el centenario del natalicio de López Mateos, y de lograr el homenaje al ex mandatario, se constituiría en el primer jefe del Ejecutivo postulado por el PRI en compartir la distinción con los héroes indígenas, de la Independencia, la Reforma, la Revolución, los movimientos sociales, así como personajes de la ciencia y la cultura.
Adolfo López Mateos fue discípulo de José Vasconcelos y se integró a la campaña presidencial del oaxaqueño, además de que libró las luchas por la autonomía universitaria, por lo que fue un destacado dirigente juvenil.
Como presidente de la República, de 1958 a 1964, López Mateos "fue un izquierdista con la Constitución en la mano", dijo el diputado Ávila Nevárez, en entrevista, y llevó a la realidad muchos ideales revolucionarios a la realidad.
Logró el crecimiento económico más dinámico e importante que ha tenido México en su historia; fue el presidente que más tierra repartió a los campesinos, después de Lázaro Cárdenas, y al nacionalizar la industria eléctrica, reivindicó para los mexicanos un servicio estratégico, que significó bienestar para las familias de menores recursos.
Fundó el ISSSTE, enfrentó el lastre del analfabetismo con importantes avances; creó la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos, que hicieron posible que la educación se convierta en efectiva oportunidad de movilidad social en la mitad del silgo 20, con lo que la Revolución Mexicana cumplió metas visualizadas desde antes del movimiento armado de 1910, año en que nació López Mateos.
Uno de los orgullos de México, el Museo Nacional de Antropología fue construido bajó la visión de estadista de López Mateos, además de que con su espíritu nacionalista se impulsó la creación de otros museos en el país. El esplendor de Teotihuacan se debe al ex presidente que rememora el diputado Ávila Nevárez.
Uno de los capítulos que elevan el perfil histórico de López Mateos es su defensa de la soberanía nacional y el respeto a la autodeterminación de los pueblos, principios con base en los cuales México votó en contra de la expulsión de Cuba de la Organización de Estados Americanos, con lo cual mostró dignidad en las relaciones con Washington.
Pedro Ávila Nevárez afirmó: "Este gran hombres arrancó al gigante del norte un pedazo de territorio nacional (El Chamizal) que se había llevado, y significó un gran triunfo de una actitud nacionalista, que a lo lejos vemos como un acto de grandeza". Además declaró el dominio nacional sobre la plataforma continental.
Y concluyó: "Como pueden ver a un siglo de su nacimiento, Adolfo López Mateos hizo historia".
Por esos méritos, propone a los grupos parlamentarios de la Cámara de Diputados que se inscriba con letras de oro el nombre de Adolfo López Mateos en el muro de honor del salón de sesiones de San Lázaro.