8 Junio, 2010 - 14:28
Napoleón Gómez Urrutia, líder del sindicato minero aseguró que el gobierno federal y Grupo México están ‘festejando con anticipación’, ya que acudirán a instancias internacionales para denunciar la toma de Cananea.
En entrevista con W Radio, el líder sindical dijo que “esto no está perdido” y afirmó que los trabajadores decidieron en asamblea no aceptar la indemnización que ofrece la empresa, pues es sólo una forma de tentarlos.
Respecto al deterioro de las instalaciones, aseguró que no existe tal, pues ‘somos un sindicato responsable y durante toda la huelga más de 70 trabajadores vigilaban el correcto funcionamiento de la mina’.
Sobre las acusaciones de su ex colaborador, Carlos Pavón, señaló que ‘es una verdadera estupidez, es un tipo pagado’.
Lo importante es el empleo: Grupo México
Juan Rebolledo, vicepresidente de Relaciones Internacionales de Grupo Minera México, señaló que en estos momentos la mina de Cananea se encuentra en tranquilidad, al igual que sus alrededores, mientras que los grupos de ingenieros están trabajando en una evaluación específica de las condiciones de la mina, lo que llevará días, "pero es algo indispensable para rehabilitarla".
En entrevista con Radio Fórmula, Rebolledo dijo que se tienen localizados algunos daños graves como el sistema de agua, de la subestación eléctrica y la capacidad de quipo como las palas, "sí tenemos varios problemas que tenemos que evaluar muy bien, al mismo tiempo estamos iniciando contrataciones de contratistas, técnicos, ingenieros, constructores para ir empezando en donde sabemos tenemos ya trabajo".
Precisó que existe un proyecto de inversión social y económico. En el caso minero se tienen planes para duplicar la capacidad de Cananea, pasar de 180 a 400 mil toneladas, dándole a la región un potencial que no ha tenido nunca. Y a México un papel protagónico en el mundo del cobre.
Indicó que en Cananea había alrededor de mil 200 trabajadores, y de ellos unos 450 se han liquidado.
http://eleconomista.com.mx/sociedad/2010/06/08/caso-cananea-no-perdido-napito