- Pedirá medidas cautelares y que se apremie a resolver el conflicto
Periódico La Jornada
Sábado 5 de junio de 2010, p. 9
Martín Esparza, dirigente del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), expondrá el lunes próximo en Perú, ante la asamblea de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), las “sistemáticas violaciones” del gobierno de Felipe Calderón a los derechos constitucionales, en particular de los trabajadores.
Apoyado por el sindicato de electricistas de Perú y otras organizaciones que acuden al encuentro regional, el líder del SME pedirá a esa comisión, dependiente de la Organización de Estados Americanos, que solicite al Estado mexicano “tomar medidas cautelares”, con el fin de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resuelva a la brevedad la solicitud de amparo interpuesta por el SME contra el decreto de extinción de Luz y Fuerza del Centro (LFC), que significó el despido de 44 mil trabajadores, el 11 de octubre pasado.
La presentación de Esparza ocurre cuando trabajadores continúan en huelga de hambre en el Zócalo capitalino, algunos de los cuales ya rebasaron 40 días de ayuno y otros lo harán en los próximos días, toda vez que la protesta se inició de manera escalonada.
Este viernes, otros dos sindicalizados fueron llevados al hospital. Uno al mediodía –por migraña severa, náuseas y vómito– y otro dos horas después por faringitis aguda y presión baja. De un grupo inicial de casi un centenar de huelguistas, hasta anoche quedaban 32.
Todo el día, el campamento recibió apoyo de diversos grupos. Ayer se sumó, con un ayuno por 48 horas, el secretario de Turismo del gobierno capitalino, Alejandro Rojas Díaz Durán. Además, integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación. Los caricaturistas Rafael Barajas, El Fisgón, y Antonio Helguera expresaron su solidaridad con los electricistas.
Al tiempo que eran atendidos los trabajadores mencionados, otros integrantes del SME realizaron una protesta frente a la SCJN, apoyados por maestros de la CNTE. En primera línea, para hablar con un ministro (aunque sólo pudieron conversar con un asesor del ministro presidente), iban Roberto Jiménez (con 28 años de antigüedad laboral en LFC) y Armando Salgado (siete), quienes están en huelga de hambre desde hace 36 días. “Exigimos justicia pronta y expedita. Pronta, pronta.”
Auxiliados por sus compañeros, señalaron que físicamente están agotados, “pero muy convencidos de lo que estamos haciendo”, expresó Salgado, ingeniero mecánico electricista, quien se desempeñaba como coordinador de cuadrillas de baja tensión.
En tanto, Esparza rechazó las declaraciones del subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación, Roberto Gil, de que el “ayuno prolongado” es una forma de protesta para presionar a los ministros y no al gobierno calderonista.
“Nuestra protesta es contra el gobierno federal fascista, el cual sistemáticamente se ha conducido con abuso de autoridad. Por culpa de ellos fuimos despojados de nuestros empleos y por ello estamos promoviendo un juicio (de amparo), la huelga de hambre de mis compañeros”, expresó.
Esparza viajó a Perú con el objetivo de participar este fin de semana en diversas reuniones, incluidas entrevistas con representantes de Amnistía Internacional y Human Rights Watch, entre otros grupos. La reunión con la CIDH está programada para el 7 de junio, explicó.
Mientras tanto, en Toluca, estado de México, integrantes de la dirigencia nacional del SME visitaron hoy el campamento que mantienen agremiados de la organización.
A 35 días de haber comenzado el ayuno frente al palacio de gobierno, sólo cuatro mantienen la protesta. Trece se han retirado, nueve están en sus casas recuperándose y cuatro se encuentran hospitalizados.