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lunes, 31 de octubre de 2011

DIPUTADOS SE DEDICAN A DEBATIR SI SE REELIGEN

Mientras el Fantasma de la Hambruna Recorre al País

*La Reforma Política se Atasca...No Habrá Candidatos Ciudadanos en 2012

*Dicen que el Primer Año es para Aprehender y Eso nos Cuesta hasta 200 Mil Pesos Mensuales por Cada Uno.

Por María de Lourdes Martínez González
Periodista de Frecuencia Laboral

La reforma política para la reelección consecutiva de legisladores que aprobaron los senadores, se atascó en la Cámara de Diputados, donde la mayoría de legisladores votó en contra de las propuestas para instaurar la revocación de mandato de los funcionarios públicos, la reelección de diputados y senadores y el referéndum.

Lo que sí se aprobó fueron las candidaturas ciudadanas independientes, pero deben presentar 106 mil firmas de apoyo para su registro. Y quedaron en el tintero otros 24 puntos en reserva, que serán el tema de debate de la primer semana de noviembre del 2011.

Debido a que esta minuta debe regresar con modificaciones a la Cámara de Senadores -de donde originalmente salió con la aprobación por concenso de la reelección de legisladores federales, que los diputados rechazaron- el propio presidente de la Mesa Directiva del Senado González Morfín, anunció que volverán a insistir en esa propuesta y tendrá que devolverse a la Cámara de Diputados para otra nueva discusión.

Por lo cual, las candidaturas independientes no entrarán en vigor antes de las elecciones para presidente de la República del 2012 y no será posible que ciudadanos ajenos a los partidos políticos contiendan para cargos de elección popular. Además de que por implicar la modificación de algunos artículos constitucionales, esta reforma política deberá discutirse también en los congresos estatales y aprobarse por dos terceras partes de los estados de la federación.

Entre el martes 25 y el jueves 27 de octubre del 2011 los diputados federales se enfrascaron en este debate que se prolongó por más de 30 horas. Inició al mismo tiempo que cuatro gobernadores de distintos estados de la República Mexicana, daban una conferencia de prensa en la que alertaron sobre las pérdidas de las cosechas de granos básicos en 8 entidades del país a consecuencia de la sequía.

A pesar de que el fantasma de la hambruna recorre a la nación, los "representantes del pueblo" no le dedicaron ni una hora al debate en el pleno de la Cámara de Diputados a discutir alternativas para garantizar la soberanía alimentaria, el empleo y frenar el cierre de empresas. Se enfrascaron en largas discusiones de hasta 10 horas consecutivas, para determinar cómo prolongan la estancia en sus curules y cómo evitar la revocación de mandato y la rendición de cuentas a la sociedad.

Por un lado, no se aprobó la revocación de mandato, lo que hizo que el PRD y el PT se desistieran de votar por la reelección como habían acordado con la fracción del PAN, argumentando que la reelección sin revocación de mandato sólo prolongaría la estancia de malos legisladores.

Los panistas se sostuvieron hasta el final en su propuesta de reelección con la afirmación de que durante el primer año de la legislatura los diputados y senadores llegan a aprehender, el segundo año medio saben hacer su labor y el tercero es cuando realmente trabajan. Por lo que requieren de otro período legislativo para aportarle un beneficio a la nación. Además de que señalaban que una manera de premiar a los diputados y senadores que sí trabajan es reeligiéndolos y de castigar con el voto haciendo perder su escaño o curul a los que no trabajan.

Pero eso le cuesta a la nación 150 mil pesos mensuales por cada diputado federal improductivo y hasta 250 mil pesos por cada senador incompetente. Y resulta honeroso mantenerles su capacitación durante los dos que aprehenden a hacer las cosas, contra argumentó el diputado federal del PRD, Emilio Serrano y el diputado federal por el PRI, Carlos Ramírez Marín.

Los priistas rechazaron desde un origen la reelección pues afirmaron que no garantiza que los legisladores trabajen mejor y sí existe el riesgo de que se sostengan en sus cargos diputados y senadores que se dedican a hacer negocios turbios. Además de que sería el primer paso para el camino de la dictadura presidencial, ya que daría pie a que posteriormente se planteara la reelección del primer mandatario.

El diputado Jorge Carlos Ramírez Marín, dijo que más que una reelección para calificar a los legisladores, funcionarían mejor las medidas disciplinarias para castigar a quienes no trabajan. Pero recordó que cuando fue presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, nunca aceptaron discutir un reglamento de sanciones. Y a partir el 2001 cuando dispusieron que se mediría su productividad por el número de iniciativas que presentan para su discusión, han presentado miles de ellas, pero a muchas sólo son para cambiarles un punto, una coma o cambiarle de número a algún artículo.

Los diputados federales del PAN que defienden la reelección opinan que es necesaria porque su primer año en la legislatura es para aprender, el segundo para arrancar y el tercero ya están capacitados para trabajar. Pero esa capacitación nos sale muy cara a los mexicanos porque los diputados federales cobran 150 mil pesos del erario público de sus dietas y comisiones y los senadores más de 200 mil pesos.

Al respecto el vicecoordinador de la bancada panista, Alberto Pérez Cuévas, opinó en entrevista con Frecuencia Laboral que es falsa la idea generalizada de que los legisladores ganan mucho, que son flojos y que no desquitan su ingreso.

"Nos tasan en tabla rasa...y no puede ser así. Aquí hay diputados que sí trabajan, que se dedican al 100 por ciento, que vienen a trabajar a fondo. Y no puede ser que por unos que no trabajan todos paguen la misma circunstancia, tiene que evaluarse y tiene que haber premios y castigos, al que cumple pagarle y al que no descontarselo. Y entonces sancionarlo o revocarlo", pero no pasó la revocación de mandato de funcionarios, por voto en contra del PRI.

Respecto a la reelección de legisladores se determinó que el próximo año se consultará a los ciudadanos sobre ese tema, en lo que será la primer tema de la consulta popular, que sí se aprobó, y se requerirá del uno por ciento de los ciudadanos de la lista nominal de electores, para que puedan solicitar que se realice ésta. Así también, se disminuyó el porcentaje del 45 por ciento de los ciudadanos en la lista nominal al 25 por ciento para que la consulta popular sea vinculante.

También se ratificó el derecho de la ciudadanía presentar iniciativas para hacer reformas a alguna ley o crear nuevas leyes, a menos de que vayan acompañadas de casi 100 mil firmas. Quedando como está actualmente que sólo pueden presentarlas individualmente las reformas o leyes los diputados federales, senadores, el presidente de la República, los congresos estatales y los gobernadores.

El diputado Juan Enrique Ibarra Pedroza comentó que "Hay en México más de 30 etnias con menos de 90 mil habitantes, entre niños y adultos. Ni siquiera los huicholes, en Jalisco que tienen 45 mil; los trikis, en Oaxaca, 29 mil, podrían presentar una iniciativa que les fuera de interés para su comunidad en cuanto a su identidad histórica, preservación de patrimonio artístico. Y ahora aquí pretendemos darle iniciativa preferencial al Ejecutivo federal. Esto verdaderamente resulta atentatorio a un régimen republicano".

Pero se ratificó la propuesta de los senadores de darle preferencia al presidente de la República, para presentar 2 iniciativas de reformas a leyes o de creación de nuevas leyes, por período legislativo, y que se desahoguen forzosamente.

Tabién se aprobó otro punto de la reforma política, el artículo 84, que señala que en caso de falta absoluta del presidente de la república, en tanto el Congreso nombra al presidente interino o sustituto, lo que deberá ocurrir en un término no mayor a 60 días, el secretario de Gobernación asumirá provisionalmente la titularidad del Poder Ejecutivo.

Fuente : Frecuencia Laboral