Miércoles 3 de octubre de 2012, p. 12
Enrique Peña Nieto confió ayer en que la reforma laboral se apruebe en el Senado y prometió a la cúpula empresarial presentar una propuesta al Congreso para que la iniciativa privada invierta más en el sector energético.
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Gerardo Gutiérrez Candiani, festejó el avance de reformas de gran calado, como la laboral, y propuso otro paquete de cambios en la Agenda por México, para que –según sus pronósticos– la economía crezca 6 por ciento y se generen un millón de empleos.
Peña, acompañado de sus colaboradores del área económica, expresó coincidencias con los planteamientos del CCE y prometió no truncar lo que ha funcionado en seguridad pública, pero dijo que dará un viraje en otros aspectos.
Reunidos en el Club de Empresarios, en la colonia Bosques de las Lomas, los dirigentes del sector privado se quejaron de la inseguridad y pidieron continuar con el Sistema nacional de seguridad pública y la Plataforma México.
Solicitaron poner énfasis en la prevención de la violencia para reconstruir el tejido social, porque muchos jóvenes están integrados al crimen, además de que demandaron profesionalizar a las policías estatales y municipales mediante controles de confianza.
Ofrece más seguridad
El presidente electo ofreció involucrar más a 400 mil policías estatales y municipales, crear agrupaciones que atiendan delitos específicos y tener presencia territorial, sobre todo en municipios donde es más evidente el crimen organizado.
Luis Farías, presidente de la comisión de estudios de la inciativa privada, aseguró que el sector energético está en crisis y frena el crecimiento del país. Propuso que Petróleos Mexicanos se concentre en el crudo y deje las actividades industriales y de riesgo a los particulares.
Peña Nieto coincidió con Claudio X. González, presidente del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios, en que debemos obsesionarnos con el crecimiento económico y para ello consideró importante ampliar la participación de la inciativa privada en el sector energético mediante una reforma que impulsará en el Congreso. Reiteró que el Estado mexicano mantendrá la propiedad y la rectoría de los hidrocarburos por conducto de Pemex y sólo permitirá a los empresarios realizar actividades para las que no hay capacidad financiera.
Antes, celebró que México haya transitado del escenario de competencia política a uno de acuerdos entre partidos para aprobar reformas estructurales, como la laboral. Insistió en que ésta generará empleos para mujeres embarazadas o jóvenes sin experiencia laboral y se mostró optimista de su aprobación en el Senado. También habló de aplicar una economía de libre mercado con sentido social.
Durante más de dos horas los empresarios presentaron una agenda de 21 programas transexenales, entre los que destacan el llamado Buen fin, la Alianza por la educación, la cédula de identidad ciudadana, el Tianguis turístico itinerante y la bursatilización de empresas paraestatales.
En la reunión privada, de la que el equipo de Peña Nieto difundió el audio, algunos líderes empresariales pugnaron por hacer una nueva reforma agraria para dar seguridad en la tenencia de la tierra a los empresarios y reimplantar el gabinete agropecuario. Otros pidieron transparentar las compras del gobierno mediante el portal Compranet y que las empresas sean liquidadas en una ventanilla para evitar andar de dependencia en dependencia a ver quién nos va a pagar.
Eduardo Solís, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, explicó que el mercado interno está en focos rojos, porque sus ventas se ubicaron en el mismo nivel de 2001, y definió la situación como una década perdida.
La Jornada
