Por : Javier Puga Martínez
2013-06-14 04:00:00
El Sindicato Mexicano de Electricistas iniciará un plantón en los municipios de Huauchinango y Nuevo Necaxa a partir de este viernes como medida para exigir al gobierno federal solución a las demandas de los trabajadores de ser reinstalados en la planta hidroeléctrica, así como revertir el decreto de extinción de desaparición de Luz y Fuerza del Centro que autorizó Felipe Calderón.
Asimismo, el plantón también exigirá un alto a los excesos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), a las altas tarifas de consumo doméstico y comercial en la región, que son ilegales y están fuera de toda norma, mencionó el sindicato.
De lo contrario, si dichas demandas no son atendidas, el SME no permitirá la realización del proceso electoral en estos municipios el próximo 7 de julio.
Para el secretario del Trabajo del SME, Román Olvera, se trata de una medida a la que están obligado los trabajadores electricistas de la región.
El integrante de la dirigencia sindical recordó que la lucha jurídica del SME aún no termina, y desde hace más de tres años y medio hay un litigio legal para exigir la reinstalación de los despedidos en octubre de 2009.
El pasado 13 de septiembre el Segundo Tribunal Colegiado de Circuito en Materia de Trabajo otorgó al SME un amparo que ordenaba la reinstalación de los trabajadores en la Comisión Federal de Electricidad (CFE), como patrón sustituto.
Incluso el Sindicato Mexicano de Electricistas presentará una denuncia ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos en Washington en contra de Felipe Calderón por violaciones a las garantías individuales de 22 mil trabajadores que fueron despedidos por decreto.
Indicó que el gobierno federal de Enrique Peña Nieto tiene la obligación de atender esta demanda y corregir los errores de su antecesor, por lo que estarán en plantón hasta el 7 de julio.
A dicha causa se suma lo que señaló son arbitrariedades de la Comisión Federal de Electricidad en el cobro de energía eléctrica.
Recordó que la CFE está realizando cobros de energía tras la extinción de Luz y Fuerza del Centro en la región Huauchinango–Necaxa, a pesar de que no firmó ningún contrato con los habitantes de estos municipios que ya recibían el servicio de energía con LFC.
La CFE está aplicando una serie de intimidaciones, amenazas y multas contra los ciudadanos a quienes pretende cobrarles cuentas que oscilan entre los 40 mil y 200 mil pesos, pero existe el caso de un comerciante al que la paraestatal le pretende cobrar 2 millones 800 mil pesos de luz, señaló.
La Jornada de Oriente